CARTA ABIERTA AL ALCALDE PROVINCIAL DE CELENDIN

Ciudadanos expresan su decepción por la Feria Taurina en Honor a la Santísima Virgen del Carmen

CARTA ABIERTA AL ALCALDE PROVINCIAL  DE CELENDIN               

                                                                     

 Trujillo o4 de agosto del 2013.

SEÑOR:

MAURO SILES ARTEAGA GARCÍA.

Alcalde Provincial de Celendín

Celendín

De mi mayor consideración:

Me dirijo a usted, en mi calidad de ciudadano nacido en esa hermosa ciudad y como aficionado taurino, para saludarlo muy cordialmente y, a la vez, para hacerle llegar mi más profundo pesar por lo que ha ocurrido este año en la Feria Taurina en Honor a la Santísima Virgen del Carmen, patrona de nuestro pueblo.

Esta carta, que será publicada en los diferentes blogs taurinos y en las redes sociales, la hago a nombre de los miles de celendinos residentes en las diferentes latitudes del orbe, que regresan a su añorada tierra a disfrutar de su afición por las corridas de toros, haciendo un importante sacrificio económico con la idea de encontrar un espectáculo digno que llene sus expectativas.

Pero nada de lo señalado anteriormente ha sucedido. Todo lo contrario, hemos retrocedido en lugar de avanzar: hemos encontrado un espectáculo deprimente, que bien se puede llamar una gran estafa. Porque se engañó al público que asistió al ruedo de la Feliciana al público que solventa este espectáculo.  A despecho de ver en el ruedo unos toros bravos y nobles, algunos más nobles que bravos, no vimos más que dos toreros  ( Torres Jerez y José Miguel Callejón) y un esforzado coleta nacional que a puro entusiasmo salvó la papeleta, el resto de los acartelados no supieron que hacer con los toros que les tocó en suerte. Una nulidad completa, y es que estos toreros no son nada en los escalafones de sus respectivas patrias. El escándalo se notó con más vergüenza cuando presentaron a una matadora de toros mejicana que se encontraba en pánico frente a los toros y que finalmente no pudo matar a ninguno de ellos y que que fueron, finalmente, apuntillados, lo mismo que ese señor que se anuncia como celendino y al que no debieron ponerlo en el cartel solo por ser celendino. Hay que contratar toreros profesionales señor alcalde, para eso paga el público.

 En lo que corresponde al tema administrativo, debemos concluir que tampoco marchó como se esperaba: un juez desconcertado y timorato que se dejó influenciar por los toreros, matadores y subalternos, para regalar orejas e indultar a un toro más noble que bravo: recuerde que entre un manso y un noble  no dista casi nada. La segunda tarde de toros se realizó sin el tercio de banderillas, por falta de los reiletes y que la comisión quiso subsanar pidiendo disculpas al público. Increíble, eso también es estafa, y una estafa no se disculpa, se condena.

Para agravar la situación, en la última tarde de toros, por falta de planeamiento y control en la construcción de ese precario armatoste en que se ha convertido la Plaza de Toros La Feliciana,  hubo un amague de catástrofe que puso en pánico a toda la afición celendina, que debió descolgarse, literalmente, de palcos y chaques, salvándose como pudo para no sufrir un accidente fatal. Esto tiene una explicación lógica que las autoridades no quieren ver: este tipo de ruedos pueden soportar solamente dos pisos: palco y chaque, como eran antes, cuando eran construidos con esmero, por los mismos propietarios y eran usados por las propias  familias y en cuyo aforo, no pasaban de 6,000 personas. A diferencia de lo que sucede actualmente, que el 90 por ciento de los más de 100 sitios es usado comercialmente, aglomerando a la gente en los cuatro metros cuadrados, hasta llegar a un aforo de cerca de 10,000 personas. Seguridad del público ante todo. La solución no está en ampliar el número de sitios, sino en ver otra alternativa: Una plaza de toro de fábrica.

Finalmente, debemos indicar que el público se ha sentido estafado por este espectáculo que en el idioma taurino se conoce como un gigantesco y grosero petardo, por lo que le recomienda escoger personalmente los miembros de la comisión que organice esta fiesta, buscando dentro de los celendinos citadinos, los más entendidos, con experiencia previa y que sepan escuchar las recomendaciones de las personas que conocen este tema, para evitar OTRO FRAUDE en los siguientes años.

Atentamente.

Walter Chávez Tejada

DNI  18143426