David Fandila "El Fandi" fue pitado en su lote y el diestro nacional Alfonso de Lima fue ovacionado.
Fuente: Perú Taurino.
El matador español Juan José Padilla se alzó como el único triunfador de la segunda corrida de la Feria del Señor de los Milagros celebrada ayer en la plaza de Acho, tras recibir dos orejas y salir a hombros de la plaza. El también hispano David Fandila "El Fandi" fue pitado en su lote y el diestro nacional Alfonso de Lima fue ovacionado.
Con cerca de tres cuartos de entrada se celebró la segunda corrida de la feria taurina limeña, en la que se lidiaron toros colombianos de de San Esteban de Ovejas (1º y 3º) y de La Ahumada (2º, 4º, 5º y 6º), desiguales en todo, edad, tipo, presentación, pitones y juego, además de mansos, descastados, difíciles y complicados, excepto el salido en cuarto lugar, el único rescatable del pésimo encierro, que rompió en bueno, con trasmisión y recorrido, por lo que fue aplaudido en el arrastre. Los demás despedidos entre pitos de los asistentes. El que cerro plaza imposible para la lidia por el peligro y sentido que traía.
Juan José Padilla, silencio y dos orejas.
David Fandila "El Fandi", pitos y pitos.
Alfonso de Lima, ovación y silencio.
Juan José Padilla, demostró su disposición, entrega y voluntad a raudales haciéndose ovacionar al torear con la capa y parear con lucimiento. En el primero de su lote, que se quedaba corto y se colaba por el pitón derecho, estuvo seguro y capaz, insistiendo con voluntad y poder en sus muletazos, embarcandolo bien y llevándolo toreado en sus pases al natural que culminó con estocada tendida. En el cuarto del festejo salió decidido a no dejar escapar el triunfo, lo que ratificó al quitar con ovacionados chicuelinas al paso y banderillear con lucimiento. Desde que cogió la muleta busco que someter las embestidas de su oponente, haciéndolo romper con su oficio y poder. Supo sacar provecho de las buenas condiciones de la res toreando con entrega, llevándolo largo y templado, con mando y buen gusto, por ambos pitones que calaron y emocionaron en los tendidos. Para luego exagerar en desplantes para las galerias, antes de pinchar y dejar una estocada efectiva por lo que recibió dos orejas como premio a su destacada labor pedidas mayoritariamente.
David Fandila "El Fandi" tuvo que pechar con un lote complicado es verdad, pero, también es verdad, que el torero no supo, ni menos quiso superar las dificultades de sus oponentes, perdiéndose en pases intrascendentes, sin acople y sin sin quietud de pies, entre el aburrimiento y pifias de la concurrencia. Esto, además, de banderillear desigual, sin lucimiento, a toro pasado, y marrar con los aceros. Su pobre actuación apenas tuvo historia, por lo que fue pitado en su lote y al abandonar el coso. "El Fandi" haría bien en no insistir en volver a torear en Lima, al menos, en algunos años.
Alfonso de Lima cumplió la papeleta con dignidad y valor en el tercero de la tarde, en faena bastante superior al toro, justificando su inclusión en los carteles feriales. Después de hacerse aplaudir con el capote, consigue instrumentar muletazos mandones entre la ovación de la concurrencia, superando las escasas condiciones del que le correspondió en suerte. Por lo que al final de su meritoria actuación saludo una sonora ovación del respetable. En el que cerro plaza, gazapón, que no se dejo picar y desarrollo mucho sentido, apenas tuvo opciones, ya que poco destacable pudo hacer ante el peligro que traía, al embestir con la cabeza descompuesta y buscar que coger al matador, por lo que el público guardo respetuoso silencio.